En un giro dramático del caso que ha mantenido en vilo a toda Argentina, la jueza Julieta Makintach ha presentado su dimisión tras ser recusada del tribunal que investiga las circunstancias de la muerte de Diego Armando Maradona. Nos encontramos ante un nuevo capítulo en este proceso judicial que ha captado la atención mundial debido a la figura legendaria que representa “El Pibe de Oro” para el fútbol argentino y el deporte mundial.
Renuncia de la magistrada y sus implicaciones en el caso Maradona
La jueza Julieta Makintach, parte del tribunal de tres magistrados que presidía el juicio sobre la muerte del astro del fútbol, ha tomado la decisión de renunciar a su cargo. Esta determinación llega después de que fuera recusada por su participación no autorizada en un documental relacionado con el caso. En una carta dirigida a las autoridades de la provincia de Buenos Aires, la magistrada expresó su pesar por el “profundo impacto institucional y social” que sus errores han ocasionado.
Consciente de la gravedad de sus acciones, Makintach reconoció que su permanencia en el cargo podría dañar la confianza pública en el poder judicial argentino. Por este motivo, consideró que su renuncia representa “la mejor contribución para restituir el prestigio de la institución y reparar los errores cometidos” durante su actuación en este proceso tan sensible para la sociedad argentina.
La participación de la jueza en la preparación de una mini-serie documental cuyo adelanto prometía revelar detalles sobre “una muerte, un ídolo, una jueza, un juicio” generó un conflicto de intereses que, según determinó el tribunal, causó “un perjuicio” para ambas partes involucradas en el proceso judicial. Este hecho provocó que su posición se volviera insostenible, llevando finalmente a su recusación a finales de mayo de 2025.
Como consecuencia directa de esta situación, el juicio que llevaba ya dos meses y medio de audiencias, con aproximadamente cuarenta testigos escuchados, fue declarado nulo. Esta anulación del proceso judicial de Maradona supone un retroceso significativo en la búsqueda de justicia por las circunstancias que rodearon su fallecimiento.
Los acusados y las circunstancias del fallecimiento del ídolo argentino
El juicio por la muerte de Diego Maradona tiene como protagonistas a siete profesionales de la salud que estaban a cargo de su cuidado. Entre ellos se encuentran médicos, un psiquiatra, un psicólogo y personal de enfermería, todos acusados de negligencias que potencialmente habrían provocado el fallecimiento del legendario futbolista argentino.
Según la acusación, Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020 a los 60 años de edad, víctima de una crisis cardiorrespiratoria complicada con un edema pulmonar. Lo más grave es que, de acuerdo con los fiscales, el ídolo argentino habría sufrido horas de agonía antes de su muerte, apenas dos semanas después de haber sido sometido a una intervención neuroquirúrgica.
La investigación busca determinar si existieron negligencias médicas en el tratamiento y seguimiento del estado de salud de Maradona durante sus últimos días. Las declaraciones de los testigos y las pruebas presentadas hasta el momento de la anulación del juicio apuntaban a posibles fallos en los protocolos de atención y supervisión médica que debían garantizar el bienestar del paciente.
El caso ha generado una enorme conmoción en Argentina, donde Maradona es considerado una figura nacional, casi mítica, cuyo legado trasciende los límites del deporte. La presión mediática y social por esclarecer las circunstancias de su muerte ha sido constante desde su fallecimiento en noviembre de 2020.
Reinicio del proceso judicial y designación de nuevos magistrados
Tras la recusación de la jueza Makintach y la consecuente anulación del juicio, las autoridades judiciales argentinas han actuado con celeridad para designar un nuevo tribunal. La semana pasada se nombró a un nuevo trío de jueces que tendrán la responsabilidad de retomar el proceso desde el principio, aunque aún no se ha establecido una fecha concreta para el reinicio de las audiencias.
Este reinicio implica que todos los testimonios deberán ser escuchados nuevamente y las pruebas presentadas otra vez ante el nuevo tribunal. Esta situación representa un desafío logístico y procesal significativo, considerando la complejidad del caso y el número de personas involucradas tanto en la acusación como en la defensa.
Los familiares de Maradona, quienes han seguido de cerca el desarrollo del juicio, han expresado su frustración por este retraso en la búsqueda de justicia. Sin embargo, también han manifestado su esperanza de que el nuevo tribunal pueda conducir un proceso transparente y justo que permita esclarecer definitivamente las circunstancias que rodearon la muerte del ídolo futbolístico.
Para los argentinos, este caso representa mucho más que un simple juicio por negligencia médica; se trata de hacer justicia por una de las figuras más queridas y admiradas de su historia reciente. La expectativa por el reinicio del proceso es enorme, y la atención mediática nacional e internacional seguirá enfocada en cada desarrollo de este emblemático caso judicial.
