La polémica en torno a las decisiones arbitrales en el fútbol de élite nunca cesa. Hoy, 14 de marzo de 2025, volvemos a abrir un debate que sigue generando controversia entre los aficionados: el penalty de Lionel Messi contra Francia en la final del Mundial 2022. Un gesto técnico que, visto con lupa años después, genera dudas sobre su validez. Analizaremos con detalle esta jugada que podría haber cambiado el rumbo de uno de los partidos más emocionantes de la historia del fútbol mundial.
La controversia del doble contacto en el penalty de Messi
La final del Mundial de Qatar 2022 entre Argentina y Francia quedará para siempre en los anales del fútbol. Un partido donde Lionel Messi abrió el marcador desde el punto de penalty tras una falta de Ousmane Dembélé sobre Ángel Di Maria. Sin embargo, al revisar detenidamente las imágenes, podemos apreciar un detalle crucial que pasó desapercibido para el árbitro Szymon Marciniak: el balón tocó el pie de apoyo de Messi antes de entrar en la portería defendida por Hugo Lloris.
Esta acción ha vuelto a cobrar relevancia tras el reciente partido entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid, donde curiosamente el mismo árbitro, Marciniak, anuló un penalty a Julián Álvarez precisamente por este mismo motivo: doble contacto. Una decisión que resultó determinante en la eliminación del Atlético frente a su eterno rival en la tanda de penaltis (2-4).
Según el reglamento de la FIFA, si el ejecutor toca dos veces el balón antes de que otro jugador lo haga, se debe señalar tiro libre indirecto (o tiro libre directo en caso de mano deliberada). Este detalle técnico es lo que ahora levanta ampollas entre los aficionados, especialmente los franceses, que ven cómo una posible irregularidad pudo inclinar la balanza en aquel memorable partido.
El arbitraje de Marciniak y la coherencia en las decisiones
Resulta llamativo que sea el mismo Szymon Marciniak quien protagonice ambas decisiones con criterios aparentemente opuestos. El árbitro polaco, considerado uno de los mejores del mundo, no apreció el doble contacto en el lanzamiento de Messi en 2022, pero sí lo hizo en el caso de Julián Álvarez recientemente. Esto plantea preguntas sobre la consistencia en la aplicación del reglamento al más alto nivel.
La tecnología actual permite analizar al milímetro cada acción, pero durante un partido la percepción humana tiene limitaciones evidentes. Sin embargo, la ausencia del VAR en esta decisión específica ha generado debate, ya que otras acciones menos relevantes sí fueron revisadas durante aquel encuentro.
Las redes sociales se han inundado con comparativas entre ambas jugadas, mostrando similitudes sorprendentes. Muchos expertos señalan que el astro argentino que actualmente mantiene distancia con el FC Barcelona se benefició de una interpretación más laxa del reglamento en un momento clave, mientras que Álvarez sufrió una aplicación más estricta.
El impacto potencial en el resultado de la final mundialista
Si el penalty de Messi hubiera sido anulado, el desarrollo del partido habría sido completamente diferente. Recordemos que aquel gol abrió el marcador y dio ventaja psicológica a Argentina. A partir de ahí, la Albiceleste amplió su ventaja hasta el 2-0, antes de que Mbappé protagonizara una histórica remontada llevando el partido a la prórroga y, posteriormente, a los penaltis.
En los torneos de máximo nivel, los pequeños detalles marcan diferencias enormes. Esta posible irregularidad no detectada podría haberse convertido en un punto de inflexión diferente. Francia podría haber planteado el partido de otra manera si el marcador hubiera permanecido 0-0 tras aquella acción.
Los aficionados franceses han recuperado esta polémica tras el episodio del Atlético-Real Madrid, considerando que existió un agravio comparativo. Sin embargo, también debemos considerar el contexto completo del partido: Francia consiguió igualar y tuvo sus oportunidades para ganar, tanto en el tiempo reglamentario como en la prórroga.
Las reglas del fútbol y su interpretación en momentos decisivos
Este episodio nos invita a reflexionar sobre la interpretación de las reglas en el fútbol moderno. La subjetividad sigue presente a pesar de las ayudas tecnológicas. La presión de una final mundial, con millones de espectadores pendientes de cada decisión, puede influir inconscientemente en los criterios arbitrales.
El propio Marciniak, considerado uno de los árbitros más respetados del circuito internacional, demostró en el reciente duelo madrileño que conoce perfectamente la regla del doble contacto y no dudó en aplicarla. Esta incongruencia entre ambas decisiones deja preguntas sin responder.
Los organismos rectores del fútbol deberían considerar protocolos más claros para estas situaciones específicas, especialmente en torneos de la magnitud de una Copa del Mundo. La transparencia en los criterios y la coherencia en su aplicación son fundamentales para mantener la credibilidad del deporte rey.
Al final, el fútbol continúa siendo un deporte donde la polémica forma parte de su esencia. Los aficionados seguirán debatiendo eternamente sobre estas decisiones, mientras los protagonistas directos probablemente tengan perspectivas muy diferentes según el color de su camiseta. Lo que queda claro es que cada detalle, por pequeño que parezca, puede cambiar la historia de nuestro deporte favorito.


